Con ritmo de zamba en sus tacones
desprendido del vaivén de sus caderas
hizo tiempo, café oscuro recién molido
colándose enredado en las esquinas de la casa.
Ella, se ve cara de luna en el espejo
tratando de entenderse vuelta luz aderezada
olorosa a hierbabuena en medio de las sombras
Con ausencia de sentido cardinal
en el nudo enredado de la corbata nueva
se hace trago ardiendo en la garganta rota
que se destila en poros y pliegues de los años.
El, se ve languidecer en la barra media noche
tratando de entenderse vuelto sombra abandonada
grito angustiado de ave herida en medio de las sombras
Agua y aceite en temblor perenne de pipeta
se enredaron en la almohada trasnochada
creyéndose amor sin apenas darse cuenta,
y se descubrieron henchidos de grietas, en pleno cataclismo
Entretejiendo círculos, cerrazones, desamores
Deshicieron el camino andado
descubiertos alborada deshecha en la cortina
cada uno hizo rumbo, sin apenas despedirse
para sumergirse de nuevo en la nada.