Es este día
un habitante sin patria.
miles deambulan en las calles
con sus comidas rápidas
entre bocinas e insultos
Con sus jugos gástricos
sus zapatos lustrados
caries
maletines negros
sus siliconas
Nos arrinconan
como a corderos
Pero no somos corderos
somos humanos
la angustia es creerse cordero
Los trenes cortan la ciudad
y la desangran
nosotros como ovejas al matadero
viajamos carentes de todo temor
perdidos entre letras de crucigrama
efemérides tontas
y noticias policiales
sin darnos cuenta
vamos a desangrarnos también
de un golpe atroz los más afortunados…
lentamente
los otros.