Dame un acorde de sol mayor
así entono mis palabras
para ver si suenan mejor.
Escribe un sostenido
en la nota de mi dolor
para que sea distinto
al que rondaba por aquí.
Déjame dos silencios
luego del acorde final
que dejó antes de irse
para encontrar como seguir.
Pensar que en los días como hoy
él era mi musa, mi clave de sol;
un acorde mayor y su arpegio.
Junto a él se fugaron
mis partituras de amor
y el valor de cada 13 al mes.
Pero es tarde, hay que seguir,
esta canción debe terminar
y yo mi vida continuar.
Cambiemos a los acordes menores,
no solo por tristeza
sino también por soledad.
Juego de fusas y corcheas
para darle movimiento
y un toque de esperanza.
Silencios otra vez,
para apreciar la calma
de un piano anciando seguir.
Es el momento para un si bemol
entre las notas del ayer
y las notas de mi futuro.
Hagamos un bis desde el comienzo
para que él entienda el daño
que causó al marcharse.
Estamos en la parte mas importante,
es hora de escribir el final
de lo que fue y lo que quiso ser.
Tres acordes son los necesarios
para que yo lo deje atrás
junto a estas notas que son canción.
Prueba un retardando y un ligato
que le den el sabor del fin
y termina el compás con un silencio.
Ahí tienes el resultado
de lo que llevo por dentro,
lo que en mi vida él dejó.
Trata de no tocar esta canción
mientras me ves olvidar,
déjala en aquel cajón
hasta que me veas caminar
sin mirar atrás.
