Entrevista a Adriano (José Gregorio Daliz), elegido mejor comentarista del VII certamen «Poemas sin Rostro».

«Este tipo de certámenes sirven como un reto al autor experimentado, donde el poeta desnudo en el poema acepta el duelo, sin la armadura del currículum.»

Entrevista a Adriano (José Gregorio Daliz)

Tal y como prometimos aquí está la entrevista. Tras la propuesta de Ave fenix y otros concursantes que propusieron un premio para Adriano por ser el mejor comentarista de esta edición, creemos que esta deliciosa entrevista será un premio para todos, ya que en ella nos deja parte de si mismo para conocerle mejor a través de sus palabras.   ¡Esperamos que os guste.!  Gracias Adriano.

Entrevista

  • ¿Quién es Adriano?

Adriano es, en este VII Certamen de Poemas sin Rostro, la voz de alguien que soy yo: José Gregorio Daliz, un venezolano que nació en la ciudad de Caracas, y creció en el barrio San Blas de la parroquia Petare, una de las comunidades ubicadas al extremo este de la ciudad capital, y que se inició en los caminos de la poesía, cuando un día descubrió que podía escribir lo que sentía, y un poco más allá, lo que pensaba, componiendo algunas canciones a los dieciséis años, necesitado de expresar su propia realidad, e inspirado en el ejemplo de cantores como el venezolano Alí Primera, el argentino Jorge Cafrune, y un viejo rockero amigo del barrio, leyenda, en la modesta historia de su vida; y en aquella época, llegaron las primeras lecturas ajenas a las directrices del liceo: El Derecho al Amor, de Phil Bosmans; Un Latinoamericano en Vietnam, de Francisco Javier Mungía; Credo Imposible, de Paul Misraki; El Túnel, de Ernesto Sábato; el Repertorio Poético de Luis Edgardo Ramírez: famoso recitador y declamador venezolano que compiló en este repertorio, obras de la poesía clásica hispanoamericana, y en el que tuve mi primer contacto verdadero con el poema escrito, y donde pude admirar su belleza como obra literaria. Y a los dieciocho años, un designio alumbró su destino en el oscuro despertar de una tragedia, y de ese dolor unido a la inocencia florecieron sus primeros versos; aún conserva de ese despertar el testimonio. A los veintiún años, la causalidad me llevó al encuentro de otras almas que andaban en la misma faena, y fueron llegando como un río: las tertulias, los recitales, los encuentros, la bohemia, los talleres literarios, los proyectos, los concursos fallidos, las lecturas que vamos buscando y las otras que el tiempo nos va exigiendo, los desencuentros, la persistencia en la palabra, la convicción en el oficio, y el amor, todo el amor en el poema. Desde aquellos años inocentes hasta hoy: creyente convencido, aprendiz solidario, y este amor, todo el amor en el poema.

  • ¿Cómo conoció este certamen? 

En el año 2010, visitando la revista digital venezolana: LETRALIA tierra de letras, en la sección -concursos-, estaba publicada la convocatoria para el “V Certamen de Poemas sin Rostro”, y accedí a la página porque el nombre del concurso llamó mi atención, me identifiqué con esa imagen; fui un lector pasivo del ese quinto certamen, y me dije: voy a participar en el siguiente; y así lo hice, estuve presente en el “VI CDPSR”. Sigue leyendo